Falacias publicitarias

La modestia del PRI

Parece que el candidato a la presidencia de la república por el PRI no quiere abrumar al electorado con tan larga lista de obras realizadas por su partido durante tantas décadas que estuvieron a cargo del Ejecutivo. No sólo le debemos al PRI tan grande obra que fue y sigue siendo el Sistema de transporte colectivo METRO. También le debemos otro tipo de obras, acciones políticas, que han sido mucho más importantes desde el punto de vista histórico.A continuación, y pido una disculpa a ustedes lectores por mi falta de memoria, enumero una breve lista de obras que le debemos al Partido Revolucionario Institucional:

1. Tlatelolco 1968
2. Crisis económicas de 1976, 1982 y 1994
3. Creación y aplicación del FOBAPROA en los años de 1990 y 1995 respectivamente (para mayor información sobre este fideicomiso véase: http://www.cddhcu.gob.mx/cronica57/contenido/cont2/cronica2.htm )
4. Ofensiva de los gobiernos de Salinas de Gortari y Ernesto Zedillo contra el EZLN

Ahora sí, podemos agradecerles a los gobiernos del Partido Revolucionario Institucional el haber dado al pueblo de México momentos históricos que, aún en el año 2006, seguimos padeciendo. Aunque el hecho de que así se haya desarrollado la historia de un partido político como el PRI no garantiza que no se puedan dar cambios considerables en su toma de decisiones políticas, parece que tener presentes tales acontecimientos puede ayudarnos a tomar una mejor decisión en estos tiempos electorales.

Falacias publicitarias
Debemos tomar con mayor reserva las campañas publicitarias que encontramos en las calles. Tales anuncios se valen de enunciados falaces que intentan persuadirnos y guiar nuestra próxima elección. Pero si somos más atentos es más difícil que nos engañen. Por ejemplo, un anuncio que intenta mostrar que los 'segundos pisos' no tienen ninguna utilidad debería mostrarlo independientemente del contexto en el cual se considere la cuestión. Parece obvio que ante gente que su medio principal de transporte es el METRO, una obra como el segundo piso no parece tener mucha utilidad. Lo mismo podríamos decir de la gente que su medio de transporte principal no es el METRO; para dichas personas, las obras que se realicen para mejorar y ampliar el METRO no son un asunto primordial. Por lo tanto, del hecho de que algunas obras públicas no vayan dirigidas a ciertos sectores de la población, no las hace irrelevantes.
En cambio, todos podemos pensar fácilmente muchas obras pendientes que sí son de una importancia vital para el país. Obras relacionadas con la seguridad pública, el desempleo, el abastecimiento de agua, por decir sólo algunas, no van dirigidas sólo a un sector de la población sino que afectan al país en su totalidad. No obstante, de tales obras no hablan mucho los candidatos (en su discurso no hallamos medidas relevantes); lo más que nos dicen es qué van a hacer, pero no nos dicen cómo. El problema es que lo interesante de un proyecto a realizar, sobre todo de un proyecto político, no es el 'qué' sino el 'cómo' porque a partir de ello es posible juzgar la viabilidad del proyecto. Existen muchos proyectos posibles, sólo algunos pocos son realizables.
Esta crítica se dirige a las campañas publicitarias de todos los partidos y no tiene una posición a favor de ninguno de ellos. La finalidad de esta nota es invitarte a que asumas una postura más crítica ante la publicidad electoral y no permitas que se te engañe. Gracias.